Proyecto de publicación que recrea la vida de un Skye Terrier luego de la muerte por tuberculosis, de su dueño el policía John Gray en 1858. Después de que su buen amigo John fuera enterrado en el Cementerio Greyfriars, Bobby no se movió del lado de su tumba nunca más de allí el que fuese apodado Greyfriars Bobby.
Bobby se convirtió en un héroe para los ciudadanos de Edimburgo y hoy en día se puede contemplar su imagen en una estatua situada al sur del Puente George IV.
Enfoque gráfico: mediante la escogencia de la paleta y los fondos se consiguió esa atmosfera taciturna y casi etérea que contrasta con las figuras centrales destacan en cada escena mediante los colores más alegres de la paleta y un contorno orgánico.
Técnica: mixta (grafito y color digital)
Cliente: Editorial Romor
Fecha de publicación: desconocida
